SILVANIO CERVANTES

SILVANIO CERVANTES IÑIGO

FUNDADOR Y PRIMER DIRECTOR DE «PAMPLONESA»

1891/1972

Silvanio Cervantes nació en Astrain, el 10 de febrero de 1891. Lo cría en Arróniz la mujer de «Juanes el zapatero». y aprende sus primeras letras y notas musicales en Lodosa, donde su padre don Saturnino actúa de comandante de la Guardia Civil; su madre doña Raimundo Iñigo era de Allo.

A los seis años comienzo los estudios de solfeo y piano con el organista Pedro Alzorriz. Ingreso como niño de coro en la Parroquia y poco después como flautín en la Banda de Lodosa.

Siempre la causaban sensación los sonidos musicales y en 1909 con motivo de unas maniobras militares en Torres del Río y ver tanto soldado y el desfile, oye la música y siente una sensación que se coloca al lado del director y desfila con una felicidad nueva y de da cuenta de su vocación musical y militar.

Al año siguiente ingresa de tambor en el Regimiento de América en Pamplona. A los 14 años, con la carrera de piano acabada, marcha decididamente como educando al Regimiento pamplonés. Tras el tiempo de instrucción y con las enseñanzas de don Juan Berruezo y el aliento de sus jefes, asciende a cabo y sargento músico.

En 1919 con permiso de sus superiores organiza y dirige una banda: La Pamplonesa: se funda, el 24 de septiembre (san Fermín chiquito) y el 11 de octubre, recorre las calles de Pamplona con jotas y pasodobles muy aplaudidos.

El 26 de mayo de 1922, participa y le consagra como un gran triunfador en un concurso de bandas de música celebrado en Zaragoza.

Baldomero Barón lo recordaba así: El recibiendo en Pamplona fue apoteósico desde la llegada a la estación de del tren, en el coche del Alcalde toma asiento el director Cervantes, los músicos ocupan un coche tranvía especial. Ya en la ciudad desde la Taconera a la Plaza Consistorial, ovaciones, vítores y disparo de cohetes. Son obsequiados por el Ayuntamiento con un refrigerio y después se dirigen tocando un popular pasodoble al local de ensayos en el edificio de la calle Compañía.

En todo el trayecto la banda es objeto de una manifestación de gran simpatía y un recibimiento efusivo.

Desde su fundación, que presidió con Vicente Sádaba «La Pamplonesa» hizo disfrutar en el kiosko, el Bosquecillo, en el Teatro Gayarre, los Civivox, en las calles y en el coso taurino con melodías universales y las composiciones consustanciales a los sanfermines.

La jota navarra de baile compuesta por Silvanio Cervantes nos deja títulos como: La Sirena, Pamplonerías, La Pilindros, La Exploradora, La Cuatrena y la Jota del Chupinazo.

Conocí a su viuda, María Consuelo Egaña que si mal no recuerdo vivía en la Plaza de la Cruz, de la capital Navarra y en las conversaciones que manteníamos, siempre reclamaba para su marido la autoría de las dianas sanfermineras (1,2 y 3) imprescindibles cada madrugada. La duda no se aclaró y en algunas publicaciones las califican como populares y en otras el autor es S.Cervantes.

Un gran crítico musical, Filare llego a testificar :San Fermín sin Cervantes sería otra cosa; ese entrañable sabor de la atmósfera pamplonesa, ese abrirse al corazón a todo el que viene, ha sido creado en gran parte por la música y la musa, la gracia, el donaire y la inspiración repajolera de Silvanio Cervantes.

Son obras pamplonesísimas , aunque muchos no sepan quien fue su autor, por el hecho de bailar su espíritu asentados en el suelo, están rindiendo un homenaje a quien las creó.